PEDRO CASTRO
La Fiscalía de La Romana informó que un abogado y una mujer fueron investigados y apresados por su alegada vinculación en los tres millones 676 mil 332 dólares decomisados en una villa de Casa de Campo.
El fiscal José Polanco dijo que el abogado José Antonio Peña, fue requerido por las autoridades porque su nombre salió a relucir en las grabaciones de las llamadas telefónicas de los números intervenidos.
Mientras que la señora Miriam Martínez fue arrestada porque llamó a Fausto Severino Marte, agente del DNI y lo puso en alerta ante la presencia de los agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Dijo el fiscal que al abogado y la mujer les fueron impuestas medidas de coerción de garantía económica de 300 mil pesos en la modalidad de contrato de una compañía aseguradora, impedimento de salida y presentación periódica ante el fiscal investigador.
Los empresarios no han sido mencionados en ninguna de las solicitudes de medida de coerción y por el memento las autoridades no tienen ningún elemento en su contra que los vincule, aunque continúan investigando.
De acuerdo a informaciones obtenidas por reporteros de El Nacional, la División Táctica de Investigaciones Sensitivas (Ditis) de la Dirección Nacional de Control de Drogas y la DEA tenían montado un operativo en alta mar denominado barrera marinera “Sea Wall” que llevaba casi siete meses en la vigilancia y durante ese período grabaron conversaciones al grupo de los detenidos, llamadas que los fiscales tienen como pruebas.
En esas grabaciones no tienen llamadas entrantes ni salientes a la villa, por lo que sospechan que Severino Marte trató de esconderse en esa residencia, tras recibir la llamada de la señora Martínez.
Severino Martínez quien trabaja en el área de la marina de Casa de Campo desde que tenía 11 años fue advertido para que no saliera del área porque las autoridades tenían las cuatro salidas rodeadas, ante esa llamada optó por estacionarse en uno los parqueos abiertos que resultó ser Terraza 4, por lo que los investigadores tienen la creencia de que se trató de un caso fortuito.
